Hasta 2,512 euros por metro cúbico de agua se puede pagar en lugares como Barcelona, una cifra gravosa para las empresas. Si bien el consumo real de agua es sólo parte de la factura (hay una parte consistente que se llevan saneamientos e impuestos), lo cierto es que intentar reducir este consumo debe ser una prioridad para la empresa, no sólo por el aspecto económico, sino también medioambiental.
Entre las maneras que tenemos de reducir estas cifras de gasto de agua en la empresa, se encuentran:
- Grifos con células fotoeléctricas: ¿Cuántas veces un empleado ha entrado al baño y se ha dejado el grifo del lavabo abierto? Este descuido puede suponer cientos o miles de litros de agua desperdiciada. Una buena solución es instalar grifos con células fotoéléctricas que activen la salida de la misma al detectar unas manos debajo. Recuerda: un grifo abierto expede entre 5 y 8 litros de agua por minuto. No la desperdicies.
- Inodoros de doble descarga: últimamente son comunes en los hogares, pero mucho menos en la empresa. Una descarga normal de la cisterna supone entre 8 y 10 litros de agua, cifra que se puede reducir con la doble descarga, que te permite optar por una opción más reducida.
- Evita las fugas: cuando tenemos una fuga en casa, nos apresuramos a repararla, mientras que en la oficina el proceso suele ser más largo, por una detección tardía, las gestiones necesarias para solucionarlo, etc. Hay que actuar rápidamente en estos casos, y no postergar la visita de un profesional para que nos solucione la fuga: un grifo que gotea puede llegar a consumir hasta 30 litros de agua en 24 horas.
- Compromete a tus empleados: Publica cada mes las estadísticas de consumo del mes anterior en el tablón de anuncios de la empresa, insta a tus empleados a usar menos agua, crea, incluso, un sistema de incentivos que premie a los empleados que menos agua consuman, o propón que si el consumo se reduce en un tanto por ciento determinado, haréis una actividad de empresa con el dinero ahorrado.
- Plan de ahorro para la limpieza: la limpieza de la oficina es una de las actividades que puede gastar más agua: no es vano, hay quien limpia los cristales con una manguera, o empleadas de la limpieza que usan una gran cantidad de agua al ordenar la oficina. Conciencia también a estos empleados, en muchas ocasiones un servicio externo, que se puede realizar el mismo trabajo gastando mucha menos agua.
¿Te has gustado nuestros consejos? ¿Los aplicas ya en tu empresa? ¿Tienes otros trucos para ahorrar agua en la oficina? ¡Cuéntanos!